jueves, 15 de septiembre de 2011

First Of May

Los Días Primero de Mayo

Cuando yo era apenas una pequeña,
y los árboles de Navidad lucían enormes,
solíamos amar la vida intensamente
mientras los demás solo preferían jugar.
No me hagan recordar más,
pero el tiempo se nos ha pasado sin sentirlo,
alguien más ha partido muy lejos de aquí.
Ahora ya que crecimos y estamos altos,
y los árboles de Navidad lucen pequeños,
a ti ya te tiene sin cuidado qué hora sea.
Sin embargo en ti y en mí, nuestro amor
nunca perecerá. Sino quién más llorará
llegados los días primero de mayo.
Del árbol de manzano que nos vio crecer,
miré las manzanas caer una por una.
Y así se me vinieron a la mente todos
los momentos aquellos. El día que besé
tu mejilla... y tu mirada se apagó.
Ahora que ya hemos crecido y estamos altos,
y los árboles de Navidad lucen pequeñitos,
a ti ya no te sirve de nada saber la hora del día.
Sin embargo en ti y en mí, nuestro amor
nunca morirá. Sino quién crees que llorará
cuando lleguen los días primero de mayo.
Cuando yo era apenas una niña,
y los árboles de Navidad parecían enormes,
dududu, dududu, dududu...
Ya no me pregunten las razones, pero
el tiempo se nos ha escapado de las manos,
alguien más se ha marchado muy lejos de aquí.


First Of May




miércoles, 7 de septiembre de 2011

El regalo

Nada en la vida ocurre por casualidad...
Si un día al despertar, usted encontrara al lado de la cama, un lindo paquete envuelto con cintas coloridas, usted abriría, antes de lavarse el rostro, rasgando el papel curioso para ver lo que hay adentro...
Tal vez hubiese allí algo que a usted no le gustase mucho... entonces usted guardaría la caja, pensando que hacer con aquél regalo aparentemente "inútil"...
Pero, si al día siguiente hay otra caja, una vez más la abriría corriendo y si de esta vez encontrara algo que a usted le gusta mucho...
Un recuerdo de alguién distante... una linda ropa que vio en una vidriera... la llave de un nuevo coche... un abrigo maravilloso para los días de frío... o simplemente un ramo de flores de alguién que se acordó de usted...
Y eso que ocurre todos los días, pero nosotros no lo percibimos...
Todos los días cuando despertamos ahí esta, en nuestra frente, una caja de regalo enviada por DIOS para nosotros: un día enterito para usarlo de la mejor forma posible !
A veces, viene lleno de problemas, cosas que no conseguimos resolver: tristeza, decepciones, lágrimas...
Pero otras veces, viene lleno de sorpresas, alegrías, victorias y conquistas...
Lo más importante es que, todos los días, DIOS envuelve para nosotros, mientras dormimos, con todo cariño, nuestro regalo: EL DÍA SIGUIENTE !
ÈL acerca a nuestros días con cintas coloridas, no importa lo que esté por venir...
Ese día cuando despertamos llamamos de REGALO...
El regalo de DIOS para nosotros.
No siempre ÉL nos manda lo que esperamos o queremos...
Pero ÉL siempre, siempre y siempre nos manda lo mejor, lo que precisamos que es más de lo que merecemos...
Abra su REGALO todos los días, agradeciendo primero a quién se lo envió, sin importarle lo que viene adentro del "paquete"
Sin duda, Él no se engaña en la remesa de los paquetes.
Si no vino hoy el paquete que usted esperaba... espera...
Ábralo mañana con más cariño, pues en cualquier momento, los sueños y planos de DIOS llegarán para usted envueltos en el regalo...
DIOS no atiende nuestras voluntades... y si nuestras necesidades...

martes, 2 de agosto de 2011

Mi Bufanda Roja

Mi bufanda roja
Todos somos pacientes.

 
Esta tarde atendí a Rocío. Una paciente a quien conozco desde hace más de diez años. Tiene un tumor retroperitoneal con múltiples metástasis. Es diabética, le colocamos un marcapasos hace un año, después tuvo un infarto. Ya no es posible operarla ni hacerle más quimioterapia. Tiene 68 años, ha sido maestra y directora de escuela durante toda su vida. Siempre me regala libros que ella lee antes y que vuelve a comprar para mí. Casi siempre los comentamos en la siguiente visita. Desde hace un mes no quería verme porque bajó mucho de peso -37 kg- y su dentadura postiza ya no le servía. Ahora tiene una nueva, por eso vino hoy. No quería que yo la viese así. Usa un pañuelo sobre la cabeza que nunca se saca delante de otras personas. Se pinta los labios y los ojos con discreción pero regularmente. No me dejó quitarle los pantalones para revisarla porque no había podido depilarse las piernas. Me trajo de regalo una bufanda roja de lana gruesa sin terminar ya que no cree que pueda seguir tejiéndola. Quería tenerla lista para esta fecha, es mi cumpleaños, pero le resultó imposible. No se la acepté. Le dije que la quería terminada y no por la mitad. Que ella podría hacerlo. Que todavía teníamos tiempo y que este no sería el último invierno. Le mentí. Yo sé que ya no será posible. Que nunca podrá terminar mi bufanda. Lo aceptó. Sospecho que más por darme el gusto que porque se haya convencido. Antes de irse me abrazó con una intensidad rara. Muy distinta a otras veces. Yo también lo hice. Nos apretamos mucho y durante un largo rato. Ella percibió el mínimo temblor de mis brazos. Mi respiración algo agitada. O no sé qué cosa. Me acarició la cara, me besó varias veces. Creo que nuestros cuerpos se dijeron adiós. Pero no pudimos decirlo con palabras. Antes de salir del consultorio, ayudada por su esposo y su hija, volvió sobre sus pasos. –“Leí en diario que publicaron otra novela de Sandor Marai. Esta tendrás que leerla vos solo”. Volví a tomarle las manos. –“No Rocío, mejor la leemos los dos y después charlamos”. Se acercó a mi oreja en puntas de pie. Tuve que sostenerla. – “No me trates como a una tonta. Vos nunca lo hiciste. Y, a propósito, dejate de joder y se feliz de una vez por todas. Se te nota en los ojos. Te quiero mucho”. Nunca antes me había tuteado. Jamás le había escuchado decir una palabra grosera. Algo había cambiado esta tarde. –“Yo también te quiero mucho. Estás preciosa maestrita”. Le dije sin pensarlo demasiado. Se fue. Vi arrancar el auto con su sombra pequeña a través de la ventanilla. Desde los árboles llegaba un estruendo de pájaros. El siguiente paciente abrió la puerta del consultorio. Me miró sin animarse a entrar. Me quedé pensando de pie frente a la ventana. No supe qué hacer con lo que había vivido durante esos pocos minutos. Desde hace un tiempo he comenzado a sospechar que mis pacientes son mi remedio. Que ellos me atienden a mí y que el enfermito soy yo.
DF

martes, 19 de julio de 2011

lunes, 11 de julio de 2011

jueves, 30 de junio de 2011

ECHANDO RAICES

No hay que ser agricultor para saber que una buena cosecha requiere de buena semilla, buen abono y riego constante. También es obvio que quien cultiva la tierra, no se para impaciente frente a la semilla sembrada, llenándola con el riesgo de echarla a perder, gritándole con todas sus fuerzas: ¡Crece, por Favor, crece!

miércoles, 11 de mayo de 2011

Normas

Que uno solo tiene que buscarlo y dárselo.
Que nadie establece normas salvo la vida.
Que la vida sin ciertas normas pierde forma.
Que la forma no se pierde con abrirnos.
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente.
Que no está prohibido amar.
Que también se puede odiar.

Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida!…

Que el odio y el amor son afectos.
Que la agresión porque sí, hiere mucho.
Que las heridas se cierran.

Que las puertas no deben cerrarse.
Que la mayor puerta es el afecto.
Que los afectos nos definen.
Que definirse no es remar contra la corriente.
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo más se dibuja.
Que buscar un equilibrio no implica ser tibio.
Que negar palabras implica abrir distancias.
Que encontrarse es muy hermoso.
Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida.
Que la vida parte del sexo.
Que el por qué de los niños tiene un por qué. Que querer saber de alguien no solo es curiosidad.
Que querer saber todo de todos es curiosidad malsana.
Que nunca está de más agradecer.
Que la autodeterminación no es hacer las cosas solo.
Que nadie quiere estar solo.
Que para no estar solo hay que dar.
Que para dar debimos recibir antes.
Que para que nos den también hay que saber como pedir.
Que saber pedir no es regalarse.
Que regalarse es en definiva no quererse.
Que para que nos quieran debemos mostrar quienes somos. Que para que alguien sea hay que ayudarlo. Que ayudar es poder alentar y apoyar.
Que adular no es ayudar.
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara.
Que las cosas cara a cara son honestas.
Que nadie es honesto porque no roba.
Que el que roba no es ladrón por placer.
Que cuando no hay placer en hacer las cosas, no se está viviendo.
Que para sentir la vida no hay que olvidarse que existe la muerte. Que se puede estar muerto en vida.
Que se siente con el cuerpo y la mente.
Que con los oídos se escucha.
Que cuesta ser sensible y no herirse.
Que herirse no es desangrarse.
Que para no ser heridos levantamos muros.
Que quien siembra muros no recoge nada. Que casi todos somos albañiles de muros.
Que sería mucho mejor construir puentes.
Que sobre ellos se va a la otra orilla y también se vuelve.
Que volver no implica retroceder.
Que retroceder puede ser también avanzar.
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol.

Como hacerte saber, que nadie establece normas, salvo la vida!

Mario Benedetti

sábado, 7 de mayo de 2011



   
Ernesto Sábato
(1911-2011)
En "Antes del Fin" 1999
Seix Barral Barcelona

Veo las noticias y corroboro que es inadmisible abandonarse tranquilamente a la idea de que el mundo superará sin más la crisis que atraviesa.
El desarrollo facilitado por la técnica y el dominio económico han tenido consecuencias funestas para la humanidad. Y, como en otras épocas de la historia, el poder, que en un principio parecía el mejor aliado del hombre, se prepara nuevamente para dar la última palada de tierra sobre la tumba de su colosal imperio.
«Indudablemente, cada generación se cree destinada a rehacer el mundo. La mía sabe, sin embargo, que no podrá hacerlo. Pero su tarea es quizá mayor. Consiste en impedir que el mundo se deshaga. Heredera de una historia corrupta en la que se mezclan las revoluciones fracasadas, las técnicas enloquecidas, los dioses muertos y las ideologías extenuadas; en la que poderes mediocres, que pueden hoy destruirlo todo, no saben convencer; en que la inteligencia se humilla hasta ponerse al servicio del odio y de la opresión.» En el ocaso del siglo xx, cómo dudar de la veracidad de estas palabras de Camus. Sin embargo, hay quienes pretenden seguir hablando acerca del progreso de la Historia, en un acto suicida que pretende mirar de soslayo el patético legado racionalista.

martes, 26 de abril de 2011

Muy Bello


The Mountain from Terje Sorgjerd on Vimeo.

MARCELO

Podrás definir nostalgia de compartir
el amor incondicional de un amigo ?

Con gusto: "Marcelo" (22/04/2009--22/04/2011)



No Me Mandes

No me mandes besos.
damelos sin prisa alguna, 
y menos si son grandes
prefiero que sean muchos
y no correr el riesgo, porque
puede que mi corazón no los encuentre
o se derramen en las grietas del camino.

viernes, 15 de abril de 2011

Verbos (Gracias Alicia)

Acompaña y comprende.
Comprende y excusa.
Excusa y ayuda.
Ayuda y consuela.
Consuela y promueve.
Promueve y sostén.
Sostén y fortalece.
Fortalece y anima.
Anima y sirve.
Sirve y perdona.
Perdona y ama.
Ama y da.
Da y olvida.

sábado, 2 de abril de 2011

León Gieco. Para la vida.

2 de Abril: *Día del Veterano de Guerra*




A Daniel... un chico de la guerra (canción)

(Autor: Alberto Cortez)

"A mí los dieciocho me pasaron de largo, estrenando opiniones, intenciones y cantos, a esa edad, como todos, con el puño cerrado, en las puertas abiertas el futuro esperando.
Al tuyo, bruscamente te lo desamarraron y te hiciste a la niebla en el mar del espanto, encallaron tus sueños Daniel, en la turba y el barro, fue la muerte bandera y la vida un milagro.
Lo mío fue distinto, Daniel, lo mío no fue nada, yo no tengo esa sombra que vaga en tu mirada.
Mi batalla fue el riesgo de un ""machete"" escondido y mi ""pozo de zorro"", un amor y un olvido, mi fusil, las pintadas en los muros vacíos y morir por la Patria, un discurso florido.
Tu excusa de ser hombre fue algo más que el motivo de la barba y el porte y el salir con amigos, fue volverte habitante, Daniel, de la lluvia y el frío, asumir el naufragio con los cinco sentidos.
Lo mío fue distinto, Daniel, lo mío no fue nada, yo no tengo esa sombra que vaga en tu mirada.
Para mí fue un asunto de madre preocupada que no fuera muy tarde mi regreso a la casa, de domingo a domingo me peinaba las alas sin andar cada jueves reclamando su alma.
La tuya, sin embargo, agotaba hasta el alba las escasas noticias de las islas lejanas, aunque fuera un indicio, Daniel, un rumor le bastaba, aunque fuera mentira, era ya la esperanza.
Lo mío fue distinto, Daniel, lo mío no fue nada, yo no tengo esa sombra que vaga en tu mirada.
El tiempo irá trayendo la amnesia inexorable , habrán muchas condenas y pocos responsables, dirán que fue preciso, dirán, inevitable y, al final, como siempre, sera Dios el culpable.
La historia necesita en sus escaparates ocultar el trasfondo de tanto disparate, no es tuya la derrota, Daniel, no cabe en tu equipaje, acaso las gaviotas otra vez en el aire.
Lo mío fue distinto, Daniel, lo mío no fue nada, yo no tengo esa sombra que vaga en tu mirada."

domingo, 27 de marzo de 2011

EL AMOR REQUIERE ESFUERZOS por Leo Buscaglia

El amor no muere por causas naturales.
Muere por negligencia y abandono.
Muere por ceguera e indiferencia
y porque se lo da por sentado.

Las omisiones son generalmente más graves
que los errores cometidos.
Finalmente, el amor muere de cansancio,
porque no se lo alimenta.
No dejamos de amar así porque si,
del mismo modo en que
nos enamoramos porque si.

Cuando el amor muere,
es porque uno o ambos amantes
lo descuidaron,
no lo avivaron ni renovaron.

Como cualquier otro ser viviente,
el amor requiere el esfuerzo
de mantenerlo sano.

Sin tu latido

 Sin Tú Latido, es como un dolor sin sentido, como un nunca haber estado ahí, como un eterno despedirse, como algo que no fue y ya nunca será, olvido y resignificación, tarea probablemente de las más duras,  largo y pesado camino donde nunca encontrará senderos ni siquiera en aquellas estelas que marcaron su impronta en el centro del ser.... 

una mañana de Abril.
Sueños






Hay algunos que dicen
que todos los caminos conducen a Roma
y es verdad porque el mío
me lleva cada noche al hueco que te nombra.

Y le hablo y le suelto
una sonrisa, una blasfemia y dos derrotas;
luego apago tus ojos
y duermo con tu nombre besando mi boca.

Ay, amor mío,
qué terriblemente absurdo
es estar vivo
sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido.

Que el final de esta historia,
enésima autobiografía de un fracaso,
no te sirva de ejemplo,
hay quien afirma que el amor es un milagro.

Que no hay mal que no cure
pero tampoco bien que le dure cien años;
eso casi lo salva,
lo malo son las noches que mojan mi mano.

Aunque todo ya es nada,
no sé por qué te escondes y huyes de mi encuentro.
por saber de tu vida
no creo que vulnere ningún mandamiento.

Tan terrible es el odio
que ni te atreves a mostrarme tu desprecio,
pero no me hagas caso,
lo que me pasa es que este mundo no lo entiendo.

Ay, amor mío,
qué terriblemente absurdo
es estar vivo
sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido.

Ay, amor mío,
qué terriblemente absurdo
es estar vivo
sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido.

Ay, amor mío,
qué terriblemente absurdo
es estar vivo
sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido.